La dieta y la nutrición tienen una gran influencia en la salud bucodental.  El tipo, la forma y la frecuencia en el consumo de alimentos y bebidas tiene un efecto directo en los dientes. Una alimentación inadecuada puede afectar de muchas y muy distintas maneras.

Como ya sabréis el consumo excesivo de alimentos ricos en azúcares como la bollería, la pastelería, la miel o los refrescos ricos en azúcares, produce la aparición de caries. La caries dental aparece como consecuencia de la disolución del esmalte por la acción de los ácidos orgánicos, los cuales se producen debido a la fermentación de los carbohidratos por acción de las bacterias.

Podemos optar por las frutas como alternativa ya que la sacarosa presente en frutas se considera de baja cariogenicidad. Entre las razones que explican este hecho están la elevada cantidad de agua que contienen.

Por otro lado, los productos ácidos como, por ejemplo, el vinagre que utilizamos de aderezo en nuestros platos, las cebollas, los pepinillos o las aceitunas atacan el esmalte de los dientes y por tanto, facilitan la aparición y el desarrollo de caries.

Algunas medidas que podemos tomar para que no se dañe el esmalte de nuestros dientes es tener una adecuada higiene dental; Realizar un buen cepillado después de cada comida. 

Acude a vernos para realizar un estudio de tus dientes y gozar de una buena salud bucodental.